“La Tierra no se vende. La Tierra es nuestra Madre.
No se vende a la Madre.
¿Por qué no le ofrecen cien millones de dólares
al Papa por el Vaticano?”Jefe Sioux
No se vende a la Madre.
¿Por qué no le ofrecen cien millones de dólares
al Papa por el Vaticano?”Jefe Sioux
En general, nuestros países, que se ignoran a si mismos, ignoran su propia historia. La historia oficial de la conquista de América ha sido contada desde el punto de vista del mercantilismo capitalista en expansión. Ese punto de vista tiene a Europa por centro y al cristianismo por verdad única. 
La iglesia admitió que los indios eran personas, dotadas de alma y razón, pero bendijo el crimen y el saqueo, los indios eran personas, pero personas poseídas por el demonio y por lo tanto, no tenían derechos y no lo tienen en la actualidad. En nuestros días, la conquista continua. Los indios siguen expiando sus pecados de comunidad, libertad y demás insolencias. La misión purificadora de la Civilización no enmascara ahora el saqueo del oro, ni de la plata: tras las banderas del progreso y las privatizaciones, avanzan las legiones de los piratas modernos con las grandes empresas multinacionales. El ingreso al Parque Machuppichu está manejado por una empresa ítalo chilena, al igual que el transporte férreo, que en realidad, es el único medio de transporte que te acerca al lugar. 
Pero como en la vida, siempre hay alternativas y nosotros la ocupamos. De ida, salimos de Ollantaytambo en bus hacia Santa Marta y como el bondi venia de Cuzco, no había butacas disponibles y por ende, nos sentamos en el pasillo. El viaje fue un infierno, muchos nos descompusimos y el polvo nos envolvía en cada curva. Luego de 4 hs llegamos al pueblo y allí tomamos una combi que nos acerco a Santa Teresa. De allí otra combi nos llevo a Hidroeléctrica, el pueblo mas cercano a Machupicchu pueblo y por las vías, nos esperaban 3 hs de caminata para llegar al fin, al pueblo conquistado.
La noche no se hizo esperar y nuestra visión se redujo al máximo, algunas linternas y cuantiosas luciérnagas que se hacían destellos, alumbraban nuestro caminar. Llegamos y acomodamos nuestros huesos en un hospedaje.
Por la mañana fuimos los cinco a las ruinas pero esa es otra historia, que será contada en la Próxima Estación: Marcos y el Cordobés por un lado, Cel por el otro y al final, Lucas y yo.
Por lo tanto, recorrimos el pueblo, pueblo pensado en verde, pueblo olvidado en polvo. El nuevo pueblo, llamado Machuppichu Pueblo es puramente comercial, calles empedradas, calles peatonal, comercios, casa de cambios y hoteles. El antiguo pueblo, llamado Aguas Calientes, está olvidado, sólo habitan los brazos baratos que hacen verde al nuevo pueblo.
Pues, la Plaza de Armas, muestra la historia sacrificada. Un inca, con su lanza en batalla, custodiado por la cruz. La iglesia, poder conquistador, aún sigue conquistando las miradas de los pueblerinos y de los turistas que se sacan fotos con lo que ha quedado del conquistado.
No soy de los que creen en las tradiciones por ser tradiciones: creo en las herencias que multiplican la libertad humana, y no en las que la enjaulan. En cambio, estimulo el hecho de que Latinoamérica pueda encontrar, en sus más antiguas fuentes, sus más jóvenes energías: el pasado dice cosas que interesan al futuro. Mirada dialéctica de la historia. Estudio materialista de la concepción del mundo. Filosofía de vida. Ni leyenda ni mito. Recuperar la realidad, ese es el desafío. Para cambiar la realidad que es, recuperar la realidad que fue, la mentida, traicionada y escondida historia de América Latina. Después de 3 noches, inicamos el rumbo a Ollantaytambo por las vías, nueve horas de caminata nos separapaban del km 82, lugar de llegada, en donde una combi por s/3 nos dejaba en el pueblo recién mencionado. Así llegamos, estenuados, con los pies hinchados y con calor. Nuestro energía fueron 10 bananas, un paquete de galletitas, 5 panes y mucha agua. Y el desgaste fue sólo físico ya que en lo monetario, en la ida y vuelta gastamos s/30 cada uno cuando si lo haciamos vía "Tren de la Alegría" el gasto ocasionaba $61 dólares. Yiramundi Gasolero. No hay triunfo sin renuncia, victoria sin sufrimiento y libertad sin sacrificio.
Hasta la Próxima Estación... Esperanza.
La iglesia admitió que los indios eran personas, dotadas de alma y razón, pero bendijo el crimen y el saqueo, los indios eran personas, pero personas poseídas por el demonio y por lo tanto, no tenían derechos y no lo tienen en la actualidad. En nuestros días, la conquista continua. Los indios siguen expiando sus pecados de comunidad, libertad y demás insolencias. La misión purificadora de la Civilización no enmascara ahora el saqueo del oro, ni de la plata: tras las banderas del progreso y las privatizaciones, avanzan las legiones de los piratas modernos con las grandes empresas multinacionales. El ingreso al Parque Machuppichu está manejado por una empresa ítalo chilena, al igual que el transporte férreo, que en realidad, es el único medio de transporte que te acerca al lugar. 
Pero como en la vida, siempre hay alternativas y nosotros la ocupamos. De ida, salimos de Ollantaytambo en bus hacia Santa Marta y como el bondi venia de Cuzco, no había butacas disponibles y por ende, nos sentamos en el pasillo. El viaje fue un infierno, muchos nos descompusimos y el polvo nos envolvía en cada curva. Luego de 4 hs llegamos al pueblo y allí tomamos una combi que nos acerco a Santa Teresa. De allí otra combi nos llevo a Hidroeléctrica, el pueblo mas cercano a Machupicchu pueblo y por las vías, nos esperaban 3 hs de caminata para llegar al fin, al pueblo conquistado.
La noche no se hizo esperar y nuestra visión se redujo al máximo, algunas linternas y cuantiosas luciérnagas que se hacían destellos, alumbraban nuestro caminar. Llegamos y acomodamos nuestros huesos en un hospedaje.
Por la mañana fuimos los cinco a las ruinas pero esa es otra historia, que será contada en la Próxima Estación: Marcos y el Cordobés por un lado, Cel por el otro y al final, Lucas y yo.
Por lo tanto, recorrimos el pueblo, pueblo pensado en verde, pueblo olvidado en polvo. El nuevo pueblo, llamado Machuppichu Pueblo es puramente comercial, calles empedradas, calles peatonal, comercios, casa de cambios y hoteles. El antiguo pueblo, llamado Aguas Calientes, está olvidado, sólo habitan los brazos baratos que hacen verde al nuevo pueblo.
Pues, la Plaza de Armas, muestra la historia sacrificada. Un inca, con su lanza en batalla, custodiado por la cruz. La iglesia, poder conquistador, aún sigue conquistando las miradas de los pueblerinos y de los turistas que se sacan fotos con lo que ha quedado del conquistado.
No soy de los que creen en las tradiciones por ser tradiciones: creo en las herencias que multiplican la libertad humana, y no en las que la enjaulan. En cambio, estimulo el hecho de que Latinoamérica pueda encontrar, en sus más antiguas fuentes, sus más jóvenes energías: el pasado dice cosas que interesan al futuro. Mirada dialéctica de la historia. Estudio materialista de la concepción del mundo. Filosofía de vida. Ni leyenda ni mito. Recuperar la realidad, ese es el desafío. Para cambiar la realidad que es, recuperar la realidad que fue, la mentida, traicionada y escondida historia de América Latina. Después de 3 noches, inicamos el rumbo a Ollantaytambo por las vías, nueve horas de caminata nos separapaban del km 82, lugar de llegada, en donde una combi por s/3 nos dejaba en el pueblo recién mencionado. Así llegamos, estenuados, con los pies hinchados y con calor. Nuestro energía fueron 10 bananas, un paquete de galletitas, 5 panes y mucha agua. Y el desgaste fue sólo físico ya que en lo monetario, en la ida y vuelta gastamos s/30 cada uno cuando si lo haciamos vía "Tren de la Alegría" el gasto ocasionaba $61 dólares. Yiramundi Gasolero. No hay triunfo sin renuncia, victoria sin sufrimiento y libertad sin sacrificio.
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1 comentario:
hola chicos, estoy organizando mi viaje a machu piichu no por mucho tiempo, seran entre 7 y 10 dias. que me recomiendan, osea, que es lo que NO me puedo perder? cuenten todo!! :)
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