es hacer la revolución...
La revolución cotidiana,
como las revoluciones de la tierra,
que son anuales.
Radio Yiramundi
No será este un relato de hazañas impresionantes, no es tampoco meramente un "relato un poco cínico"; no quiere serlo, por lo menos. Es un trozo de dos vidas tomadas en un momento en que cursaron juntas un determinado trecho, con identidad de aspiraciones y conjunción de ensueños. Un hombre en nueve meses de su vida puede pensar en muchas cosas que van de la más elevada especulación filosófica al rastrero anhelo de un plato de sopa, en total correlación con el estado de vacuidad de su estómago; y si al mismo tiempo es algo aventurero, en ese lapso puede vivir momentos que tal vez interesen a otras personas y cuyo relato indiscriminado constituiría algo así como estas notas. Así, la moneda fue por el aire, dio muchas volteretas; cayó una vez "cara" y alguna otra "seca". El hombre, medida de todas las cosas, habla aquí por mi boca y relata en mi lenguaje lo que mis ojos verán; a lo mejor sobre diez "caras posibles solo vi una "seca", o viceversa, es probable y no hay atenuantes; mi boca narra lo que mis ojos le contaron.

Próxima Estación... Esperanza. Yiramundi
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