En un pueblo con mar,
la noche es de luna de miel...
Gonzalo Clandestino
El viaje fue largo y espeso. Pues hicimos dos paradas y tomamos tres bondis para llegar a destino. Una vez que arrimamos al pueblo, nos instalamos en “Los Manglares” que nos hospedó por s/ 2.50 por persona.
Mar y Cel armaron su carpa, mientras que con Gamu y el Cordobés, dormimos en unos colchones con las bolsas de dormir en una galería. El clima calido y seco del lugar nos permitió disfrutar de sus playas los cinco días que duro la estadía y jugamos los primeros fuchis praieros. Dos fueron los match ante equipos locales y dos fueron los triunfos para el equipo Yiramundi.
El pueblo, pequeño por cierto, estaba dividido por la ruta Panamericana, que cumplía en la zona urbana como la avenida más importante. Allí estaban sus restaurantes panaderías, comisaría, tiendas y la feria artesanal el “Malecón” en donde vendimos algunas cosas que nos sirvió para abonar el boleto hacia Ecuador.
Justamente, el 12 de mayo, abandonamos tierras incaicas. Perú, en nuestro paso, nos ofreció su historia. Nos abrió sus puertas para descubrir su pasado, nuestro pasado, de tierras oprimidas, de voces silenciadas, de puños apretados y de almas torturadas.
Civilización y barbarie: “Europa somos nosotros, aunque hayamos nacido en tierras bárbaras”, “cultos son los que se parecen a nosotros”, “ser desarrollados es ser como nosotros”. Se identifica a la cultura con el aprendizaje académico o el talento solitario y se opone la “civilización”, venida desde arriba y desde afuera, a la “barbarie”, que está abajo y adentro.
En fin, Perú nos despidió a balacera ciega, dicen en nuestro país, en Bolivia y en Ecuador que los oriundos de estas tierras son ladrones, nosotros no los queremos juzgar, quizás emprendieron un largo retardo de conquistar lo que le han robado a lo largo de su historia.
la noche es de luna de miel...
Gonzalo Clandestino
El viaje fue largo y espeso. Pues hicimos dos paradas y tomamos tres bondis para llegar a destino. Una vez que arrimamos al pueblo, nos instalamos en “Los Manglares” que nos hospedó por s/ 2.50 por persona.
Mar y Cel armaron su carpa, mientras que con Gamu y el Cordobés, dormimos en unos colchones con las bolsas de dormir en una galería. El clima calido y seco del lugar nos permitió disfrutar de sus playas los cinco días que duro la estadía y jugamos los primeros fuchis praieros. Dos fueron los match ante equipos locales y dos fueron los triunfos para el equipo Yiramundi.
El pueblo, pequeño por cierto, estaba dividido por la ruta Panamericana, que cumplía en la zona urbana como la avenida más importante. Allí estaban sus restaurantes panaderías, comisaría, tiendas y la feria artesanal el “Malecón” en donde vendimos algunas cosas que nos sirvió para abonar el boleto hacia Ecuador.
Justamente, el 12 de mayo, abandonamos tierras incaicas. Perú, en nuestro paso, nos ofreció su historia. Nos abrió sus puertas para descubrir su pasado, nuestro pasado, de tierras oprimidas, de voces silenciadas, de puños apretados y de almas torturadas.
Civilización y barbarie: “Europa somos nosotros, aunque hayamos nacido en tierras bárbaras”, “cultos son los que se parecen a nosotros”, “ser desarrollados es ser como nosotros”. Se identifica a la cultura con el aprendizaje académico o el talento solitario y se opone la “civilización”, venida desde arriba y desde afuera, a la “barbarie”, que está abajo y adentro.
En fin, Perú nos despidió a balacera ciega, dicen en nuestro país, en Bolivia y en Ecuador que los oriundos de estas tierras son ladrones, nosotros no los queremos juzgar, quizás emprendieron un largo retardo de conquistar lo que le han robado a lo largo de su historia.
Radio Yiramundi. 0.00 Mhz. Alta Fidelidad. La Voz de los Sin Voz.
Próxima Estación… Esperanza.
Más fotos en este nick: http://almaclandestina.spaces.live.com/photos/cns!688FE8E521F1C3BF!1268/
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